Los cazadores de la Vega pagarán más por menos.
Una orden de la Junta de Castilla y León obliga a pagar por cazar en los Montes de Utilidad Pública.
Se trata de la orden 1666/2006 de 18 de octubre que obliga al pago de 341 €uros por cazar en la zona de Las Barrancas hace unos años reforestada por esta administración al ser declarado aquel terreno por el Ayuntamiento de Vega de Santa María como Monte de Utilidad Pública y estar incluido en el Catálogo de Montes de U.P. de la provincia de Ávila
La Junta, para declarar Monte de Utilidad Pública obedece un mandato de acuerdo plenario del Ayuntamiento de Vega de Santa María que en fecha 2 de junio de 2005 acordó en pleno solicitar a la Junta de Castilla y León que los terrenos pertenecientes al Ayuntamiento y que constituyen la parcela catastral nº 5048 del polígono 3 de 33, 65 hectáreas fueran declarados de Utilidad Publica. Posteriormente en un escrito de fecha 15 de noviembre rectifica las hectáreas aumentándolas y las deja en 54, 8454, pasando estas a ser efectivas para la gestión de la Junta, en fecha en fecha 31 de julio de 2006 con la denominación de Monte de Valchiquito, repoblado de pinus pinea y de 57,9847 hectáreas de superficie.
De los 341 €uros que hay que pagar para cazar allí, antes de que se abra la veda genral, son destinados el 85 % al Ayuntamiento y sólo el 15 % para la Junta que reinvierte la inversión en obras en el terreno, alcanzando este último porcentaje a 50 €uros.
Esto hace que el Ayuntamiento reciba dos veces dinero del coto por esas tierras, en caso que se decida pagar: una por los terrenos que incluye la matriculación del coto y otro tanto especifico de este nuevo impuesto por estar declarado Valchiquito como Monte de Utilidad Pública.
La solución a estos casos en otros cotos como los del Valle del Tietar que viven situaciones parecidas, se ha resuelto pagando el Ayuntamiento la tasa.
La declaración de U.P. del terreno repoblado de la Vega, merma las decisiones sobre el mismo del Ayuntamiento, cediendo la gestión a la Junta de Castilla y León, cuya primera consecuencia negativa es que los ganaderos no puedan pastar en la cerca y la segunda, la caza con más costes si al final se decide pagar.
Mal favor hace el Ayuntamiento a los cazadores que se sienten dueños del coto, pues decidieron organizarse como tal para beneficio de los aficionados de Vega de Santa María, que ven ahora como a espaldas del pueblo y en oscuras y poco públicas gestiones, se les usurpan unos derechos por los que estaban pagando y aún desconocen que si son vistos por las autoridades forestales cazando en esos terrenos por los que pagan y están incluidos en su coto, pueden ser sancionados y que no pueden organizarse eventos cinegéticos, como las cacerías del zorro, pues podría en este caso ser sancionado el coto como tal.