Lluvias de mayo
El mes de mayo ha terminado con una tormenta que ha dejado en la Vega 10 litros de agua de lluvia por metro cuadrado. Aunque es insuficiente lo precipitado, si que viene a reparar un tanto el daño que la sequía estaba produciendo.
Los campos verdes se están pintando con tonalidades de amarillo. Es el color del verano, del secado de la espiga, si bien recrea el sentido de la vista y la belleza del campo se multiplica con los colores rojos de las amapolas, azules del tomillo y amarillos de la jara, la falta de agua va a hacer mermar el granado del pan y sufriremos otra mala cosecha, que no compensará tanto esfuerzo y dedicación como los agricultores han puesto en sus tareas.