Problemas con la Motoniveladora
La motoniveladora de la mancomunidad está arregalndo algunos caminos del término municipal de la Vega. Entre ellos el camino de Santo Domingo.
Justo a la altura de donde se ha construído la casa de mandera y la dueña ha practicado una enorme zanja, al lado del camino, al ir a arreglar la máquina aquél desvarío, se ha unido, ha patinado, y ha quedado atrancada, debido al abundante agua que mana del drenaje de ls Charcas de Arriba destruído.
Para desatrancarla se ha pretendido usar la excavadora de la mancomunidad y las máquinas se han averiado.
Se da la circunstancia de que la motoniveladora había sido recientemente reparada de una avería. Pero esta reparación consistió en quitar movimientos hidraúlicos a la cuchilla, lo que implica que en los trabajos que el maquinista ha realizado en caminos como el de Villanueva, han dado un resultado imposible: estrechando el camino, sin limpiar las cunetas, eliminando la grava de la calzada, levantando las piedras que al camino se le aplicaron cuando la concentración parcelaria...
Ahora la avería viene por la inmovilidad y la presión que el barro ejerce sobre la motoniveladora, y actualmente está intentando ser reparada.
Esta máquina es muy vieja y los costes de personal y mantenimiento superan con creces a los resultados. Es el empecinamiento de los responsables para mantenerla lo que está llevando a que los caminos estén impracticables y se esté gastando un dinero que si se hubiera contratado con una empresa privada, ya habría dado sus frutos.
El ayuntamiento paga ahora haber permitido realizar una zanja de iconmesurables dimensiones a la propietaria de la finca de la casa de madera, sin tener cuando menos en cuenta, que al romper la conducción de agua de las Charcas de Arriba, se iba a empantanar la zona.
La actuación poco clara de urbanizar un terreno rústico, sin avales, sin informes técnicos, sin proyectos de impacto medioambiental, y sin atender a todas las normas escritas que para otros vecinos son implacables, deja en evidencia a los gobernantes que tenemos: manejados por intereses ajenos e incapaces de ejercer la voluntad de todos los vecinos.