FIESTA DE SAN ISIDRO
El 15 de mayo los agricultores celebraban la fiesta de San Isidro. Este año, pidiendo protección especial para unos cultivos que han tenido de todo según que época: buen tiempo, hielos fuertes, sequía y agua abundante.
Los campos se muestran ahora preciosos, con mucha desigualdad en su proceso de crecimiento: miestran en algunas tierras ya espigan las plantas en otras, más tardias, sigue creciendo el tallo, por lo que se prevé que la maduración y el secado también sea desigual.
La fiesta ha consistido. como en otros años, en misa y procesión con el santo, esta vez bendiciendo los campos a la entrada del pueblo, allá en la cruz de los caídos.
Tras la bendición un ágape, esta vez en el bar, donde se ha podido degustar unos estupendo bacados y sobre todo una deliciosa tortilla que Mamen prepara como nadie.
Se ha echado de menos al Presidente de la Cámara, ausente por trabajo en Extremadura. Pero el detalle mejor de la reunión, ha estado cuando Ina ha gritado en medio del banquete, aprovechando el silencio que dejaba las bocas llenas: ¡Viva San Isidro! Un momento para recordar, para estar orgullosos de los que somos y de donde venimos. Ina ha puesto el dedo en la llaga y ha ayudado a tener presente el motivo por el que estamos reunidos, que no era la comida. 
Mucho más público en el combite, unas cincuenta personas y no tantas en la misa. Esperemos que el santo protector no tenga estos detalles en cuenta.