La Revista de Vega de Santa María Derribo de las cruces del Calvario en 1891

Derribo de las cruces del Calvario en 1891

Era Papa León XIII. España vivía la Restauración Borbónica siendo regente  María Cristina de Habsburgo-Lorena, ante la minoría de edad de Alfonso XIII. Regia la Constitución española de 1876.
Era obispo de Ávila Juan Muñoz Herrera.
El párroco de Vega de Santa María era don Justo Hacha Rovira
Era alcalde Nicasio García Bermejo
Mire el lector lo que nos dice la historia de nuestro pueblo y lo que reza en los archivos del Ayuntamiento de Vega de Santa María, que reproducimos fielmente:      

AÑO 1891

 PROFANACIÓN DE EFECTOS DESTINADOS AL CULTO RELIGIOSO

“En la madrugada de este día han aparecido tiradas por el suelo varias cruces de piedra del calvario público de esta Villa (…)”

15 de diciembre de 1891

El escribano D. Juan Ramón Gutiérrez; Juez Municipal Bernardino Gallego; Secretario Froilán Jiménez.
Nicasio García Bermejo, alcalde Constitucional
Resultan como presuntos autores cinco mozos del inmediato pueblo de Velayos.

*Declaración del tabernero Manuel Fernández Rodríguez de 31 años.
Habían estado bebiendo vino en su establecimiento como día de función muchos hombres de varias edades y profesiones, que a las ocho y media estuvieron en su establecimiento Antonio Moñivas, soltero, hijo de Luis, alias Solano; Marcelino, el barbero, soltero; Isidro Muñoz, soltero e hijo de Canero; Pedro Martín, soltero, hijo de Desgracias; Braulio Hidalgo, soltero, apodado Capé; Severiano, apodado el Verde, soltero; José, apodado Pupo; el pajarero, soltero; Manuel Muñoz, apodado el Civil y un hijo del apodado Ricacho, soltero, todos vecinos de Velayos. Que cerca de las nueve salieron de su casa en busca de bailes y diversiones. Que sobre las once han vuelto a entrar en su establecimiento, echaron aguardiente y se despidieron cortésmente.

*Declaración del tabernero Francisco Jiménez Adanero de 42 años.
            Reconoce a las mismas personas y se ratifica en las horas aproximadas con igual declaración que el anterior.

*Declaración de Martín Tolbaños Arévalo, conocido como Quirico.
            Que la madrugada del día 9 al 10, salió de su caso con dirección a la estación de Velayos a cumplir con sus deberes y que a unos cuantos metros de distancia observó y sintió hablar a varios jóvenes llamados Antonio Muñoz, apodado Solano; Marcelino el barbero; Isidro Muñoz, apodado Serrano y Severiano, apodado el Verde. Todos solteros y vecinos de Velayos. Que afeando el depravado fin de los autores le dijeron que eran otros y no ellos, que eran los que estaban en la taberna de Manuel.

El Juez de Vega de Santa María, dicta providencias para que declaren Pedro Martín, soltero, hijo de Deogracias; Braulio Hidalgo, apodado Capé; José, apodado Pepo, el Pajarero, Manuel Muñoz, apodado el Civil y un hijo del apodado Pericacho y que declaren previo Antonio Muñoz, apodado Solano, Marcelino, el barbero; Isidro Muñoz, apodado Canero y Severiano, apodado el Verde.

*Interrogatorio a Perfecto, apodado el Pajarero: Perfecto Rivero, apodado Pepo, natural de Velayos, soltero, de 21 años de edad, hijo de Bonifacio y de María Álvarez, dice que no estuvo en la función.

*Interrogatorio a Nemesio Lumbreras, apodado Pericacho, soltero de 20 años, hijo de Francisco y María Hidalgo (difunta) dice que estuvo ese día en El Escorial y se quedó en Las Navas y que a las ocho salimos de Velayos y fuimos a la Vega los mozos Leoncio García, apodado Chiles; Pedro Martín, hijo del tío Desgracias: Braulio Hidalgo, apodado Capé y que llegaron los cuatro a la taberna de Manuel donde estuvieron cenando, en compañía del barbero, del tío Civil, el de Carezco, el de Solano, el criado de Gabriel el zapatero, Severiano el Verde. Que terminaron de cenar y se fueron a casa a las nueve y a las diez estaban en Velayos y las cruces estaba bien colocadas cuando volvieron.

*Declaración de Marcelino Gutierrez, soltero de 21 años, barbero: Dice que él no ha sido.

*Declaración de Severiano, el Verde, soltero de 21 años: Dice que vino con los mozos Nemesio Lumbreras, Leoncio García, Pedro Martín, León Muñoz y Perico, oficial de Gabriel, Antonio Muñoz, Isidro Muñoz y Marcelino. Se fueron al baile en casa de Jesús Sahagún y cuando volvieron a Velayos observaron las cruces del calvario tiradas.

*Declaración de Isidro Muñoz Moreno, soltero de 19 años de edad, labrador, vecino de Velayos. Dice que cenó en la taberna de Manuel, con Leoncio García, Manuel Muñoz, Nemesio Lumbreras, Perico, oficial de Gabriel y Pedro Martín, quedándose Marcelino Gutiérrez y Severino el Verde, que los mozos con los que iba no han sido.

*Testificación de Antonio Muñoz, soltero, de 17 años, labrador de Velayos. Que cenaron en la taberna y cuando volvieron encontraron las cruces caídas, pensando dar parte en cuanto llegaron a Velayos.

Providencia para llamar al implicado Leoncio García “Chiles”

*Declaración del implicado Leoncio García Mayoral, apodado Chiles, natural de Velayos de 19 años, soltero, de oficio huevero, hijo de Dimas y Francisca. Viste pantalón de pana rayada, blusa azul, chaleco color café y faja negra, borregón y boina azul marino.
Ignora la causa y dice que cuando ellos pasaron las cruces estaban de pie.

Se remiten las diligencias al Juez de Instrucción de la ciudad y su Partido.

El Juez solicita tasación de los daños a los peritos Francisco Fernández Martín y Epifanio Jiménez Moñivas. Estos tasan en 15 pesetas colocar cada cruz. Señalan que hay una cruz partida cuatro dedos por encima de la peana.

La causa la instruyen Don Ramón Carramolino, juez de esta vecindad y el escribano Juan ramón Gutierrez.

El Juez de Vega de Santa María, Bernardino Gallego Jiménez, cita para juicio, por medio del Juez de Velayos a
Leoncio García Mayoral  
Nemesio Lumbreras Hidalgo
Pedro Martín Sáez
Braulio Hidalgo Manzanares
Y como testigos a Antonio Muñoz Muñoz, Marcelino Gutiérrez García, Isidro Muñoz Adanero y Severiano “el Verde” que le excusa su padre al ubicarle en El Escorial, en la vía RENFE, hacia Zarzalejo.

En el juicio, los testigos y citados autores, se ratifican en que no saben quien ha sido y se solicita para ellos la absolución.

No conocemos la sentencia.

 

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